Saludo del embajador en el natalicio de su majestad el emperador de Japón

Tengo el honor y el gusto de saludarlos para celebrar el natalicio de Su Majestad el emperador de Japón.

Este 23 de febrero, Su Majestad cumple 64 años, y toda la familia de la Embajada del Japón en Bolivia desea manifestarle sus más sinceras felicitaciones.

Durante el último año, nuestro mundo observa cómo se agravan algunos conflictos internacionales y también la emergencia de ciertas acciones orientadas a dividir la comunidad internacional. Son momentos difíciles que nos hacen pensar que, tal vez, estemos viviendo un momento de inflexión histórica. Por otro lado, la historia nos enseña que las batallas entre seres humanos resultan en ciertos grupos beneficiados, pero dejando un mundo devastado por los conflictos. Por ello, nuestra misión es responder a los desafíos más grandes con la fuerza del diálogo, en lugar de la división y la confrontación. En tiempos como los actuales, Japón reitera su firme convicción de seguir promoviendo una diplomacia de paz que no dependa de la fuerza militar, y con miras a mantener y fortalecer un orden internacional libre, abierto y basado en el Estado de derecho.

 Desde un punto de vista más personal, me gustaría resumir mi relación con Bolivia. Durante el último año, visité varias regiones donde conocí a gente que me recibió con calidez. Vi, en cada caso, un camino amplio y llano para que las relaciones entre nuestros países se sigan fortaleciendo todavía más. También hay un gran potencial para la cooperación cultural y económica, además de la cooperación para el desarrollo.

En parte, creo que nuestras espléndidas relaciones bilaterales se deben a que nuestros países comparten una larga tradición de amistad, afianzada por la confianza y el entendimiento mutuo para cooperar aún más. Por ejemplo, este año, Bolivia y Japón celebran ciento diez años del establecimiento de sus relaciones diplomáticas y ciento veinticinco años de la llegada de los primeros inmigrantes japoneses a Bolivia. Los nikkeis que viven en Bolivia son una parte importante del grupo de personas que han construido las bases de estas relaciones de amistad. Por ello, aprovecho estas líneas para expresarles mi gratitud.

Me complace informarles que, con motivo de estos dos aniversarios,  la Embajada está preparando varios eventos, no solo para conmemorar estos hitos históricos, sino esperanzados en que sean un aporte para que los círculos de amistad que nos rodean se amplíen. Precisamente, una de las actividades es la creación de una sección especial en nuestro portal de internet, dedicada a conmemorar los 110 años del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre Bolivia y Japón y los 125 años de la llegada de los inmigrantes japoneses a Bolivia.

A lo largo del año, iremos publicando en esta página enlaces a artículos dedicados a nuestra historia de intercambios, a la cultura japonesa o al aporte y las iniciativas de los japoneses en Bolivia, utilizando conocimientos o tecnología japonesa.

El primer artículo de esta colección está dedicado a la historia detrás de la llegada de los japoneses a Bolivia hasta llegar al establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países. Habla de cuándo llegaron los primeros japoneses al continente americano, sus razones y cómo se fue formando una comunidad japonesa hasta llegar al 13 de abril de 1914, cuando se firmó un tratado de comercio entre Japón y Bolivia.

Espero que les guste.

(Descargar el artículo sobre la historia).